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Responsables del departamento de Cultura de Gobierno Vasco buscan espacios viables para el inminente nuevo emplazamiento de la sede oficial en Bilbao de la Sinfónica de Euskadi, que dejaría su actual sede en Donostia tras tres décadas de interinidad. “No tiene sentido que una orquesta esté en Buffalo, pudiendo estar en Nueva York”, ha afirmado Asier Estraunza, concejal bilbaíno, y uno de los principales gestores en la sombra de esta importante decisión. El concejal donostiarra Peru Usandizaga ha declinado hacer declaraciones a la espera de ver cómo maduran los acontecimientos, pero fuentes de toda solvencia dan por hecho que Donostia vería con buenos ojos la operación siempre y cuando conllevara a modo de compensación el definitivo impulso a la remodelación de Anoeta, campo oficial de la Real Sociedad, por parte del Gobierno Vasco, una operación de gran calado social y presupuestario.
El traslado de la sede de la Euskadiko Orkestra a Bilbao es consecuencia de las conversaciones que se han desarrollado en los últimos meses para materializar lo antes posible la fusión entre la formación dependiente del Gobierno Vasco y la Sinfónica de Bilbao, sostenida por Bizkaia y Bilbao sin participación del Gobierno Vasco, algo que siempre se ha sentido en el entorno institucional de la orquesta de Bilbao como un dislate presupuestario y un agravio comparativo. Además del traslado a Bilbao de la orquesta, la solución adoptada implica que la Euskadiko Orkestra se anunciará como Euskadiko Orkestra en sus conciertos en Donostia, Vitoria-Gasteiz e Iruña, mientras que en Bilbao y en giras internacionales o conciertos en otras comunidades se anunciará como “Orquesta Sinfónica de Bilbao y Nacional de Euskadi”. Este modelo parece inspirado en el adoptado hace años por la Sinfónica de Barcelona, ahora Sinfónica de Barcelona y Nacional de Catalunya. La razón es no perder la antigüedad que la formación bilbaína otorgaría a la orquesta resultante de la fusión, pues la Sinfónica de Bilbao está próxima a cumplir cien años (2022) y ya ha cerrado para ese primer centenario shows tan importantes como “Raphael Philarmónico” o el musical “Nosferatu en Butrón”, encargo de la propia BOS al compositor bilbaíno Fernando Velázquez con dirección de escena de Calixto Bieito.
El anuncio de la fusión tendrá lugar en las próximas semanas en la cima de Besaide, intersección entre Araba, Gipuzkoa y Bizkaia. En la misma rueda de prensa se anunciará cómo queda el reparto de los activos culturales entre los territorios una vez decididas la fusión y el traslado, así como el uso futuro de las instalaciones de la Euskadiko Orkestra en Miramón, que podrían ser derruidas para integrar ese espacio en el previsto “Disneyland Donostia”, uno de los proyectos estrella del consistorio donostiarra. En la presentación en Besaide comparecerá el consejero Bingen Zubiri, que posee doble nacionalidad en su condición de hernaniarra afincado en Bizkaia, y se ha valido de esa singular condición para erigirse en protagonista de estas decisiones y acuerdos.
NOTA: noticia publicada el 28 de diciembre, día de los Inocentes
